Entrenamiento funcional: beneficios, diferencias y desventajas en el mundo del fitness

hace 11 meses · Actualizado hace 6 meses

El entrenamiento funcional es un método de ejercicio que se centra en movimientos naturales del cuerpo, trabajando de forma global los músculos y las articulaciones.

entrenamiento funcional

Sus beneficios incluyen la mejora de la movilidad, agilidad y equilibrio, desarrollo de la salud cardiovascular, corrección de la postura y fortalecimiento muscular.

Algunos ejercicios funcionales destacados son las sentadillas, flexiones, zancadas, burpees y dominadas.

Es importante tener precauciones y conocer las desventajas del entrenamiento funcional para evitar lesiones y considerar alternativas según las preferencias. Aquí te mostramos los mejores centros de entrenamiento funcional en Murcia, si eres de la zona.

Contenidos
  1. ¿Qué es el entrenamiento funcional?
  2. Beneficios del entrenamiento funcional
  3. Ejercicios de entrenamiento funcional
  4. Circuitos de entrenamiento funcional
  5. Entrenamiento funcional en diferentes niveles
  6. Precauciones y desventajas del entrenamiento funcional

¿Qué es el entrenamiento funcional?

El entrenamiento funcional es una metodología de ejercicio que se ha vuelto muy popular en los últimos años debido a su capacidad para mejorar la condición física general y el rendimiento deportivo. Se basa en realizar movimientos que imitan las acciones cotidianas del cuerpo, enfocándose en la función y el movimiento global de los músculos y las articulaciones.

Definición y concepto del entrenamiento funcional

El entrenamiento funcional se puede definir como una forma de ejercicio que se centra en mejorar la funcionalidad de nuestro cuerpo para realizar actividades diarias y deportivas de manera eficiente y segura. A diferencia de los entrenamientos convencionales, se enfoca en trabajar músculos de forma integrada y comprometiendo múltiples articulaciones al mismo tiempo.

Este enfoque se basa en el principio de que el cuerpo está diseñado para moverse en patrones de movimiento naturales, como agacharse, levantar, empujar, tirar y girar. Por lo tanto, el entrenamiento funcional se concentra en desarrollar la fuerza, resistencia, flexibilidad, equilibrio y estabilidad en estos patrones de movimiento.

Principios y fundamentos del entrenamiento funcional

El entrenamiento funcional se rige por algunos principios y fundamentos que lo diferencian de otras formas de ejercicio. Estos son:

  • Adaptabilidad: El entrenamiento funcional se puede adaptar a las necesidades individuales de cada persona, teniendo en cuenta su nivel de condición física, objetivos y limitaciones.
  • Movimientos naturales: Se enfoca en movimientos que imitan las acciones comunes del cuerpo, permitiendo mejorar la capacidad funcional en actividades de la vida diaria.
  • Trabajo global del cuerpo: Se busca involucrar múltiples grupos musculares y articulaciones al mismo tiempo, brindando beneficios integrales y mejorando la coordinación y estabilidad.
  • Mejora de la funcionalidad: El objetivo principal es mejorar la forma en que nuestro cuerpo se mueve en la vida cotidiana y en actividades deportivas, lo que se traduce en una mayor eficiencia y prevención de lesiones.

Estos principios y fundamentos son la base del entrenamiento funcional y proporcionan una estructura sólida para desarrollar rutinas de ejercicio efectivas y personalizadas.

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Beneficios del entrenamiento funcional

El entrenamiento funcional ofrece una amplia gama de beneficios que contribuyen al mejoramiento de la salud, el bienestar general y el rendimiento deportivo. A continuación, se detallan algunos de los principales beneficios de este tipo de entrenamiento:

1. Mejora de la salud y bienestar general

  • Promueve la salud cardiovascular y respiratoria, ayudando a fortalecer el sistema circulatorio y aumentar la resistencia física.
  • Contribuye a mantener un peso corporal saludable al aumentar la quema de calorías durante los entrenamientos y acelerar el metabolismo.
  • Mejora la salud articular al fortalecer los músculos que rodean las articulaciones y aumentar la estabilidad.

2. Fortalecimiento y desarrollo de la musculatura

  • Trabaja de forma global diferentes grupos musculares, permitiendo un desarrollo equilibrado y funcional del cuerpo.
  • Aumenta la fuerza y la resistencia muscular, lo que se traduce en un mayor rendimiento en actividades cotidianas y en la práctica deportiva.
  • Contribuye al fortalecimiento de la musculatura estabilizadora, mejorando la postura y reduciendo el riesgo de lesiones.

3. Mejora de la postura corporal

  • Ayuda a corregir desequilibrios musculares y debilidades en la musculatura postural, promoviendo una postura correcta y aliviando molestias en la espalda y el cuello.
  • Fortalece los músculos del core, incluyendo los abdominales y los músculos de la espalda, brindando una mayor estabilidad a todo el cuerpo.

4. Aumento de la resistencia y la flexibilidad

  • Mejora la resistencia cardiovascular, permitiendo realizar actividades físicas prolongadas sin fatiga excesiva.
  • Aumenta la movilidad y la flexibilidad en las articulaciones, lo que facilita la realización de movimientos cotidianos y previene la rigidez muscular.
  • Estimula la elasticidad muscular, lo que favorece la prevención de lesiones y facilita la recuperación muscular después de un esfuerzo físico intenso.

5. Mejora del rendimiento deportivo

  • Aumenta la capacidad funcional del cuerpo, permitiendo una ejecución más eficiente de movimientos específicos en diferentes disciplinas deportivas.
  • Mejora la coordinación y la agilidad, lo que se traduce en un mejor desempeño en actividades que requieren cambios rápidos de dirección y movimientos explosivos.
  • Optimiza la capacidad de reacción y respuesta motriz, fundamentales en deportes de alto rendimiento y situaciones que demanden una rápida toma de decisiones.

Ejercicios de entrenamiento funcional

El entrenamiento funcional se basa en movimientos naturales del cuerpo, trabajando de forma global los músculos y las articulaciones. En esta sección, exploraremos algunos de los ejercicios clave de este tipo de entrenamiento:

1. Sentadillas: beneficios y ejecución correcta

Las sentadillas son un ejercicio funcional destacado que activa varios grupos musculares, incluyendo el erector de columna, el glúteo, los isquiotibiales, el cuádriceps y el abdomen. Además de fortalecer la musculatura de las piernas, las sentadillas contribuyen a mejorar la flexibilidad en las caderas, aumentar la resistencia cardiovascular y mejorar la postura corporal. Es importante realizar este ejercicio con la técnica correcta para evitar lesiones y maximizar los beneficios.

2. Flexiones de brazos: variaciones y efectividad

Las flexiones de brazos son un ejercicio fundamental del entrenamiento funcional que fortalece los músculos del pecho, los hombros, los brazos y el core. Existen diferentes variaciones de este ejercicio, como las flexiones en diamante, las flexiones con apoyo elevado o las flexiones con una mano. Cada variación enfatiza diferentes grupos musculares y puede adaptarse según las capacidades individuales. Su efectividad radica en el trabajo conjunto de múltiples músculos y en la mejora de la resistencia y la estabilidad del tronco.

3. Zancadas: fortalecimiento de piernas y glúteos

Las zancadas son un ejercicio de entrenamiento funcional que trabaja la musculatura de las piernas y los glúteos. Al realizar zancadas, se emplean los músculos del cuádriceps, los isquiotibiales y los glúteos, además de los músculos estabilizadores del abdomen y la espalda baja. Este ejercicio ayuda a mejorar la fuerza y la resistencia en las piernas, incrementando la estabilidad y el equilibrio.

4. Burpees: ejercicio completo de cuerpo entero

Los burpees son un ejercicio funcional completo que involucra diversos grupos musculares y trabaja tanto el sistema cardiovascular como el muscular. Consiste en realizar un movimiento combinado de flexiones, saltos y sentadillas. Los burpees son ideales para mejorar la resistencia, la coordinación y la fuerza en todo el cuerpo, ya que implican tanto a los músculos superiores como inferiores al mismo tiempo.

5. Dominadas: desarrollo de la fuerza en la parte superior del cuerpo

Las dominadas son un ejercicio funcional fundamental para trabajar la fuerza de la parte superior del cuerpo, especialmente en los músculos de la espalda, los hombros y los brazos. Realizar dominadas requiere de un buen control de la técnica y fuerza en la musculatura de la espalda y los brazos.

Existen diferentes variaciones de dominadas, como las dominadas con agarre amplio o estrecho, las dominadas con banda elástica o las dominadas asistidas con máquina. Estas variaciones permiten adaptar el ejercicio según el nivel de cada individuo, facilitando su progresión.

Estos ejercicios funcionales son solo una muestra del amplio abanico de opciones que ofrece el entrenamiento funcional. Cada uno de ellos tiene beneficios específicos y puede ser adaptado a las capacidades físicas de cada individuo. Es importante realizarlos bajo supervisión y aprender la técnica correcta para obtener los mejores resultados y evitar lesiones.

Circuitos de entrenamiento funcional

Diseño y estructura de un circuito funcional

Los circuitos de entrenamiento funcional son una forma eficiente y dinámica de desarrollar fuerza, resistencia y mejorar la condición física. Estos circuitos consisten en una serie de ejercicios realizados de manera secuencial, donde cada ejercicio se realiza durante un tiempo determinado antes de pasar al siguiente.

Para diseñar un circuito funcional efectivo, es importante tener en cuenta los siguientes aspectos:

  • Variabilidad: Incluir ejercicios que trabajen diferentes grupos musculares y habilidades físicas.
  • Intensidad: Ajustar la dificultad de los ejercicios y el tiempo de trabajo y descanso para adaptarse al nivel de condición física de cada persona.
  • Orden: Organizar los ejercicios en un orden lógico y progresivo para asegurar una correcta activación muscular y evitar lesiones.
  • Equilibrio: Incluir ejercicios que trabajen tanto la parte superior como la inferior del cuerpo, así como los músculos estabilizadores.

Ejemplos de circuitos de entrenamiento funcional

Existen diferentes tipos de circuitos de entrenamiento funcional que se pueden adaptar a las necesidades y objetivos de cada persona. A continuación, se presentan algunos ejemplos de circuitos:

  • Circuito de fuerza: Este circuito se enfoca en la mejora de la fuerza muscular y puede incluir ejercicios como sentadillas, flexiones, zancadas y dominadas.
  • Circuito de resistencia: Este circuito se centra en mejorar la resistencia cardiovascular y muscular, con ejercicios como burpees, saltos de cuerda, escaladores y sprints.
  • Circuito de equilibrio y coordinación: Este circuito se enfoca en mejorar el equilibrio y la coordinación, incluyendo ejercicios como caminar sobre una línea, hacer equilibrio en un bosu y lanzar y atrapar una pelota.

Recomendaciones para la práctica de circuitos funcionales

Al realizar circuitos de entrenamiento funcional, es importante tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

  • Calentamiento: Realizar un calentamiento adecuado para preparar el cuerpo para el esfuerzo y prevenir lesiones.
  • Técnica correcta: Prestar atención a la técnica adecuada de cada ejercicio para maximizar los beneficios y evitar lesiones.
  • Descanso adecuado: Tomar descansos breves entre los ejercicios para permitir la recuperación y evitar el agotamiento excesivo.
  • Progresión gradual: Comenzar con un circuito adecuado para el nivel de condición física y aumentar gradualmente la intensidad, el tiempo de trabajo y el número de repeticiones a medida que se gana fuerza y resistencia.
  • Escucha al cuerpo: Si sientes dolor o fatiga extrema, detente y descansa. Escucha a tu cuerpo y respétalo.

Entrenamiento funcional en diferentes niveles

El entrenamiento funcional es altamente adaptable a las diferentes capacidades físicas de las personas, lo que lo convierte en una opción viable para todo tipo de individuos. A continuación, se presentan tres enfoques específicos del entrenamiento funcional según los diferentes niveles de condición física:

Entrenamiento funcional para principiantes

Para aquellos que recién comienzan su viaje en el entrenamiento funcional, es importante comenzar con ejercicios básicos que se centren en aprender la técnica correcta y desarrollar una base sólida. Algunas consideraciones para el entrenamiento funcional de principiantes incluyen:

  • Realizar ejercicios de bajo impacto y adaptados a las capacidades individuales.
  • Enfocarse en movimientos fundamentales como sentadillas asistidas, flexiones de rodillas y planchas modifcadas.
  • Incrementar gradualmente la intensidad y complejidad de los ejercicios a medida que se adquiere más fuerza y habilidad.
  • Incluir períodos de descanso adecuados entre ejercicios y sesiones de entrenamiento.

Entrenamiento funcional para deportistas avanzados

Para aquellos que buscan llevar su entrenamiento funcional al siguiente nivel, existen muchas opciones para desafiar y mejorar su condición física. Algunas recomendaciones para el entrenamiento funcional de deportistas avanzados incluyen:

  • Incorporar ejercicios más complejos y demandantes como dominadas sin asistencia, sentadillas con peso adicional y burpees explosivas.
  • Trabajar en mejorar la resistencia y la velocidad ejecutando circuitos de alta intensidad con poco tiempo de descanso.
  • Incluir ejercicios específicos para la mejora del rendimiento deportivo, como movimientos explosivos para la parte superior del cuerpo o ejercicios de equilibrio y estabilidad.
  • Mantener un enfoque en la correcta ejecución técnica para evitar lesiones y maximizar los beneficios del entrenamiento.

Adaptaciones y modificaciones según las capacidades físicas

El entrenamiento funcional se adapta a las necesidades individuales, lo que significa que puede ser ajustado para personas con diferentes capacidades físicas. Algunas consideraciones para adaptar el entrenamiento funcional según las capacidades incluyen:

  • Modificar la intensidad y el volumen de los ejercicios para adaptarse a las limitaciones o restricciones físicas.
  • Incorporar ejercicios de baja intensidad con énfasis en la flexibilidad y la movilidad articular para personas con menor condición física.
  • Utilizar equipamiento o asistencias adecuadas, como bandas elásticas o soportes, para facilitar la ejecución de ejercicios más desafiantes.
  • Consultar con profesionales de la salud, como fisioterapeutas o entrenadores, para obtener recomendaciones personalizadas y seguras.

Precauciones y desventajas del entrenamiento funcional

Riesgos de lesiones y prevención

El entrenamiento funcional, al ser un tipo de ejercicio de alta intensidad, conlleva ciertos riesgos de lesiones si no se realiza correctamente o si se excede la capacidad física del individuo. Es importante tener en cuenta algunas precauciones para minimizar el riesgo de lesiones durante la práctica del entrenamiento funcional:

  • Mantén una técnica adecuada al realizar los ejercicios, prestando atención a la alineación del cuerpo y evitando movimientos bruscos.
  • Calienta adecuadamente antes de iniciar el entrenamiento, ello ayudará a preparar los músculos y articulaciones para el esfuerzo.
  • Incrementa gradualmente la intensidad y la carga de los ejercicios a medida que tu condición física mejore, evitando excederte demasiado rápido.
  • Escucha a tu cuerpo y descansa cuando sea necesario. No te fuerces más allá de tus límites y evita el sobreentrenamiento.
  • Utiliza equipamiento adecuado y asegúrate de que esté en buen estado.

Limitaciones y contraindicaciones del entrenamiento funcional

Aunque el entrenamiento funcional es beneficioso para la mayoría de las personas, existen ciertas limitaciones y contraindicaciones que deben tenerse en cuenta:

  • Personas con lesiones o condiciones médicas preexistentes, como problemas articulares o de espalda, deben consultar a su médico antes de comenzar un programa de entrenamiento funcional.
  • Individuos que requieran un enfoque más específico, como la rehabilitación de una lesión o una condición médica, pueden necesitar un programa de entrenamiento personalizado y supervisado por profesionales de la salud.
  • El entrenamiento funcional puede no ser adecuado para personas mayores con problemas de equilibrio o movilidad limitada. En estos casos, es recomendable buscar opciones de ejercicio más seguras y adaptadas a sus necesidades.

Alternativas al entrenamiento funcional según las preferencias

Si el entrenamiento funcional no es de tu agrado o no se adapta a tus preferencias, existen varias alternativas que puedes considerar para mantener una vida activa y saludable:

  • Entrenamiento con pesas: El levantamiento de pesas es una excelente opción para desarrollar fuerza muscular y mejorar la composición corporal.
  • Ejercicios cardiovasculares: Realizar actividades como correr, nadar, andar en bicicleta o practicar deportes aeróbicos puede ayudarte a mejorar la resistencia cardiovascular y quemar calorías.
  • Prácticas de yoga o pilates: Estas disciplinas se centran en la flexibilidad, el equilibrio y el fortalecimiento del núcleo, brindando beneficios similares al entrenamiento funcional.

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